viernes, 31 de marzo de 2017

Después de un tiempo, y por un momento dejé de creer en las concepciones de mi alma, y en los ribetes de mi corazón.

Luego de un tiempo, dejé de creer en las diatribas de mi propia memoria, y regalé mis opciones y mis miles de caminos y oportunidades a personas que jamás creyeron en sus sueños.

Después de un tiempo, anudé mi lengua para no crearme una fantasía aleatoria a mi verdadero valor, y no parecer descontento a la par de todos aquellos que van marchando a la música que crean unos pocos.

Luego de un tiempo, renegué de todo lo que había visto, oído y presenciado; borré completamente mi memoria, y regresé a mi infancia, donde mi única preocupación fuese no ver las primeras gotas de una lluvia, o no presenciar el último haz de luz de un día de invierno.

Después de un tiempo, dejé mis protestas fuera del vocabulario, relajé mis puños y mis piernas dejaron de correr.

Luego de un tiempo, dejé que mis esperanzas volaran como aviones de papel, y que mis preocupaciones rolaran en el altamar de una cuneta de barrio.

Después de un tiempo miré a mi madre en silencio, e imaginando nuevamente estar en su vientre, me acurruqué a su lado para que me regalara su calor una vez más.

Luego de un tiempo, escudriñé el cielo de día, siendo mi única preocupación ver a esos aviones que dejan una estela tras de sí.

Luego de un tiempo, miré el cielo de noche, siendo mi única alegría el contar las estrellas, y cuando me perdiera, volver a empezar...

Después de un tiempo, cerré mis ojos, reí con todas mis fuerzas, y con todas mis ganas. Y lentamente mi silencio, se fue transformando en una verdadera conversación con mi ser, con mi Dios, con lo que soy, con lo que jamás seré.

Y fue que por un momento... fui libre al fin.

©Jesús Alejandro Godoy

Ser fuerte es amar a alguien en silencio.
Ser fuerte es irradiar felicidad cuando se es infeliz.
Ser fuerte es intentar perdonar a alguien a quien nos cuesta perdonar.
Ser fuerte es esperar cuando no se cree en el retorno.
Ser fuerte es mantenerse en calma en momentos de desesperación
Ser fuerte es demostrar alegría cuando no se siente.
Ser fuerte es sonreír cuando se desea llorar.
Ser fuerte es hacer a alguien feliz cuando se tiene el corazón hecho pedazos.
Ser fuerte es callar cuando lo ideal sería gritar a todos su angustia.
Ser fuerte es consolar cuando se precisa de consuelo.
Ser fuerte es elogiar cuando se desea maldecir.
Ser fuerte es tener fe en aquéllo que no se cree.
Por eso, por más difícil que tu vida pueda parecer:

¡Ámala y sé Fuerte!

Autor Desconocido

Cuando alces tus alas para iniciar aquella ilusión que amas, no te derrumbes si encuentras a personas que no te dejarán elevar tu soñar.

Habrá ocasiones que te intentarán retener para que no llegues a alcanzar lo que está en tu anhelar.

Eres el único que decide hasta donde quieres llegar, la actitud que tomes en esos momentos te darán tu altitud.

Forja tu virtud con lo mejor de la juventud, más si te aferras a lo que deseas, tu vuelo será elevado, aliméntate de aquellos sueños alcanzados, llénate de mil experiencias y transfórmate en ellas, en lo maravilloso de tener y de creer en tu ser, no tengas miedo a volar porque siempre va a haber personas con tu mismo ideal que te acompañarán al final.

Vive día a día, comprendiendo que sólo va haber esa alegría, lo demás será lo que tu decidas, solo vive, y cuando te eleves recuerda lo grande que eres.

Desconozco su autor

Cuando al despertar las fuerzas te flaqueen, 
cuando el día te parezca gris, 
cuando la claridad del sol oscurezca tu mirada, 
cuando esa mano amiga, haya dejado de estar, 
cuando te creas encontrar sin salida, 
cuando nada tenga sentido para tí, 
cuando los valores carezcan de la escala tuya...

¡SONRÍE!

Siempre encontrarás esa luz, que encenderá tu mirada 
otros brazos que te atenderán sin necesidad de reclamarlos una luz que alumbrará sin que tú la enciendas una puerta que se abrirá sola alguien que te hará cambiar de idea.

POR ELLO...

Con tu sonrisa ayudarás a quien la necesite te sentirás mejor, viendo que gracias a ella, alguien lo hace secarás las lagrimas de un niño o anciano una sonrisa vale más que una palabra sonríe, pero abiertamente. 
Con ella, ayudarás, sin duda alguna, a sonreír. 
Solo de esta manera, serás feliz. 

SONRÍE AMIGO, PESE A TODO.

Desconozco a su autor


martes, 28 de marzo de 2017

Si me ves cansado fuera del sendero, ya casi sin fuerzas para hacer camino.

Si me ves sintiendo que la vida es dura, porque ya no puedo, porque ya no sigo... 
ven a recordarme cómo es un comienzo, ven a desafiarme con tu desafío.

Muéveme en el alma, vuélveme al impulso, llévame a mí mismo.

Yo sabré entonces encender mi lámpara en el tiempo oscuro, entre el viento frío.

Volveré a ser fuego desde brasas quietas, que alumbre y reviva mi andar peregrino.

Vuelve a susurrarme aquella consigna del primer paso para un principio.

Muéstrame la garra que se necesita para levantarse desde la caída.

Si me ves cansado fuera del sendero, sin ver más espacios que el de los abismos

Trae a mi memoria que también hay puentes, que también hay alas que no hemos visto,

Que vamos armados de fe y de bravura, que seremos siempre lo que hemos creído.

Que somos guerreros de la vida plena, y todo nos guía hacia nuestro sitio.

Y que un primer paso, y que un nuevo empeño, nos lleva a la forma de no ser vencidos.

Que el árbol se dobla, se agita, estremece, deshoja y retoña, pero queda erguido.

Que el único trecho que da el adelante es aquel que cubre nuestro pie extendido.

Si me ves cansado fuera del sendero, solitario y triste, quebrado, herido.

Siéntate a mi lado, tómame las manos, entra por mis ojos hasta mi escondrijo.

Y dime . . . ¡SE PUEDE!, e insiste, ¡SE PUEDE!, hasta que yo entienda que puedo lo mismo.

Que tu voz despierte, desde tu certeza, al que de cansancio se quedó dormido.

Y, tal vez, si quieres, préstame tus brazos, para incorporarme, nuevo y decidido.

Que la unión es triunfo cuando hombro con hombro vamos, ¡sí, se puede!, con el mismo brío.

Si me ves cansado fuera del sendero, lleva mi mirada hacia tu camino.

Hazme ver las huellas, que allá están marcadas, de un paso tras otro por donde has venido.

Y vendrá contigo una madrugada, la voz insistente para un nuevo inicio.

Que abriré otro rumbo porque sí he creído, QUE SIEMPRE SE PUEDE... se puede, mi amigo!

Desconozco su autor


Cuando el cielo esté gris: 
Acuérdate cuando lo viste profundamente azul.

Cuando sientas frío : 
Piensa en un sol radiante que ya te ha calentado.

Cuando sufras una derrota : 
Acuérdate de tus triunfos y de tus logros.

Cuando necesites amor : 
Revive tus experiencias de afecto y ternura.

Acuérdate de lo que has vivido y de lo que has dado con alegría.

Recuerda los regalos que te han hecho, los besos que te han dado, los paisajes que has disfrutado y las risas que de ti han emanado.

Si ésto has tenido lo podrás volver a tener y lo que has logrado, lo podrás volver a ganar.

Alégrate por lo bueno que tienes y por lo de los demás; desecha los recuerdos tristes y dolorosos, no te lastimes más. 

Piensa en lo bueno, en lo amable, en lo bello y en la verdad.

Recorre tu vida y detente en donde haya bellos recuerdos y emociones sanas y vívelas otra vez.

Visualiza aquel atardecer que te emocionó.

Revive esa caricia espontánea que se te dio.

Disfruta nuevamente de la paz que ya has conocido, piensa y vive el bien. 

Allá en tu mente están guardadas todas las imágenes y solo tú decides cuáles has de volver a mirar.

Desconozco su autor

domingo, 26 de marzo de 2017

...Y cuando se hizo grande, su padre le dijo:

- Hijo mío, no todos nacen con alas. Y si bien es cierto que no tienes obligación de volar, opino que sería penoso que te limitaras a caminar teniendo las alas que el buen Dios te ha dado.

- Pero yo no sé volar - contestó el hijo.

- Ven - dijo el padre.

Lo tomó de la mano y caminando lo llevó al borde del abismo en la montaña. 
- Ves hijo, este es el vacío. Cuando quieras podrás volar. Sólo debes pararte aquí, respirar profundo, y saltar al abismo. Una vez en el aire extenderás las alas y volarás...

El hijo dudó.

- ¿Y si me caigo?

- Aunque te caigas no morirás, sólo algunos machucones que te harán más fuerte para el siguiente intento - contestó el padre.

El hijo volvió al pueblo, a sus amigos, a sus pares, a sus compañeros con los que había caminado toda su vida.

Los más pequeños de mente dijeron: 
- ¿Estás loco? 
- ¿Para qué? 
- Tu padre está delirando... 
- ¿Qué vas a buscar volando? 
- ¿Por qué no te dejas de pavadas? 
- Y además, ¿quién necesita volar?

Los más lúcidos también sentían miedo: 
- ¿Será cierto? 
- ¿No será peligroso? 
- ¿Por qué no empiezas despacio? 
- En todo casa, prueba tirarte desde una escalera. 
- ...O desde la copa de un árbol, pero... ¿desde la cima?

El joven escuchó el consejo de quienes lo querían. 
Subió a la copa de un árbol y con coraje saltó... 
Desplegó sus alas. 
Las agitó en el aire con todas sus fuerzas... 
pero igual... se precipitó a tierra...

Con un gran chichón en la frente se cruzó con su padre:

- ¡Me mentiste! No puedo volar. Probé, y ¡mira el golpe que me di!. No soy como tú. Misalas son de adorno... - lloriqueó.

- Hijo mío - dijo el padre - Para volar hay que crear el espacio de aire libre necesario para que las alas se desplieguen.

Es como tirarse en un paracaídas... necesitas cierta altura antes de saltar.

Para aprender a volar siempre hay que empezar corriendo un riesgo.

Si uno no quiere correr riesgos, lo mejor será resignarse y seguir caminando como siempre...

Jorge Bucay


viernes, 24 de marzo de 2017

La amistad consigo mismo, es como la perla de gran valor, adquiriendo esta riqueza, se adquiere todo lo demás.

Lejos de hacernos egoístas, nos hace más generosos. Si estás en paz con tu alma, estarás en paz con el cielo y con la tierra, nadie puede ayudar a otro sin ayudarse a sí mismo.

Nos enfermamos cuando no nos amamos. ¿Quién puede dar lo que no tiene?

El amor es libre o no es. No se puede forzar ni prescribir, nace en la libertad o no existe.

Lo que se hace libremente jamás puede llamarse sacrificio. La libertad con que se obra, es lo que lo distingue, entonces no es sacrificio, sino un don.

El egoísmo es la falta de amor a sí mismo, tal como la sobreprotección revela la falta de amor al otro.

Para ser genuinamente humilde, hay que amarse a sí mismo. El reconocerse, no es humillación que revela no amarse.

El soberbio, pedante, prepotente, intenta compensar el déficit de amor a sí mismo. Un corazón tierno, ennoblece nuestras esperanzas, pues nos convertimos en lo que creemos y esperamos.

“Necesito de mi plenitud para la tuya”. Nos damos a nosotros lo que damos a los otros, porque todos somos UNO.

« La vida es como una moneda, puedes gastarla como desees, pero sólo puedes gastarla una vez».


Desconozco a su autor


"El verbo mágico que hoy y en el futuro debe guiar tu vida es : ¡Creer!

Creer primero que nada en ti, pues nadie mejor que tú conoce todos tus sacrificios, tu entrega y tus propias verdades incambiables.. 

Debes Creer en ti, porque tu pasado no ha sido años de tiempo perdido, de sacrificios inútiles, sin frutos ni provecho alguno. Esa verdad palpable, tangible, que llevas en tu corazón, no será nunca alterada ni arrancada de ti. 

Llevas para siempre impresa en tu alma, la profunda y reconfortante certeza de haber obrado bien y con tus mejores intenciones. Conservas en lo más hondo de tu ser, el rico tesoro que te hará sentir el sentimiento que te va a decir: ¡Misión Cumplida! 

Tienes que pensar con grandeza, y decirte: 

- Creo en mí, pues de mí ha nacido verdad y vida. 
- Confío en mí, porque yo he sido y soy fortaleza. 
- No existe amargura ni dolor que consiga atar mi alma libre. 

Debes tratar de ignorar el dolor, pues no te dejará ver y sentir las grandezas de tu alma. 

Tu vida comienza un nuevo camino cada día, pero no es un sendero de amargura, dolor, y soledad, sino que es un bello camino de esperanza e ilusión, en donde todo está por que lo descubras, y en donde no hay tiempo para que te canses o te abandones. 

Ahora, debes levantar tu cabeza y mirar el fulgurante sol que cada mañana madruga para ti. 

Y entonces llegará la más maravillosa paz que jamás hayas sentido. Descubrirás nuevas alegrías e ilusiones, y a partir de ese momento sentirás cómo tu corazón y alma se elevan en un aura de gloria, pues tu gozo será tan grande que te hará sentir un nuevo ser. Será como volver a nacer. 

Tú sabes que has hecho del amor un reino de entrega y verdad para ti y los demás, pero ahora debes creer en ti, y forjar una fortaleza de paz para tu corazón. 

No prives al cielo de tu mirar, levanta tu rostro y permite a los pájaros y los ángeles contemplar la belleza que abunda y reina en ti. 

Arráncate el dolor, toma de nuevo tu alegría y siembra de ilusiones una nueva tierra, y verás como la vida agradecerá tu esfuerzo. Nada, hay perdido, todo en ti es victoria, pues cabe mayor triunfo en tu vida. 

Todo radica en conjugar siempre este verbo: ¡Creer! y saber que tú eres el vencedor y dueño de tu vida. En tener la convicción de que tú has amado sin medida, (aunque las cosas no hayan salido como lo esperabas). Porque son muy pocos los que aprenden a amar y sienten el amor de verdad. 

Ahora debes dejar nacer en ti un nuevo ser, con una nueva luz, y en donde tu "yo" más íntimo es lo más valioso y primordial. 

Desconozco a su autor


Temía estar solo, hasta que aprendí a quererme a mi mismo.
Temía fracasar, hasta que me di cuenta que únicamente fracaso cuando lo intento.
Temía lo que la gente opinara de mí, hasta que me di cuenta de que de todos modos opinan de mi.
Temía me rechazaran, hasta que entendí que debía tener fe en mi mismo.
Temía al dolor, hasta que aprendí que éste es necesario para crecer.
Temía a la verdad, hasta que descubrí la fealdad de las mentiras.
Temía a la muerte, hasta que aprendí que no es el final, sino más bien el comienzo.
Temía al odio, hasta que me di cuenta que no es otra cosa más que ignorancia.
Temía al ridículo, hasta que aprendí a reírme de mi mismo.
Temía hacerme viejo, hasta que comprendí que ganaba sabiduría día a día.
Temía al pasado, hasta que comprendí que es solo mi proyección mental y ya no puede herirme más.
Temía a la oscuridad, hasta que vi la belleza de la luz de una estrella.
Temía al cambio, hasta que vi que aún la mariposa más hermosa necesitaba pasar por una metamorfosis antes de volar.

Hagamos que nuestras vidas cada día tengan mas vida y si nos sentimos desfallecer no olvidemos que al final siempre hay algo más.

Pablo Ciappa
Me sorprendió saber que el derivado del verbo "comprender" es, literalmente, "observar estando debajo".

Hay una gran dosis de sabiduría en ello. Para comprender algo, debes conocerlo a fondo, de abajo arriba.

A los seres humanos nos gusta hacer juicios precipitados. Tenemos opiniones acerca de todo, incluso cuando no sabemos nada de esos temas.

Desperdiciamos gran cantidad de tiempo haciendo predicciones, estimando, especulando, decidiendo y criticando, habitualmente sin ningún fundamento.

La mayoría de las veces que comprendemos las cosas en función de lo que sabemos de nosotros mismos, lo que a menudo puede ser muy pobre, desde luego.

De ésto se deduce que una mejor comprensión de nosotros mismos nos conduciría más cerca de una comprensión de los demás.

Cuando somos capaces de aceptar los modos imprevisibles que tenemos de comportarnos y de pensar, podemos llegar a tener más claro por qué los demás hacen lo que hacen y piensan lo que piensan. 

Un viejo adagio indio dice:

Que no podemos comprender a nadie hasta pasar una buena temporada en sus zapatos.

A esto yo añadiría que debemos considerar el estar más cómodos en nuestros propios zapatos, antes de intentar introducirnos en los de otro.

Desconozco su autor

jueves, 23 de marzo de 2017

El dinero puede comprar una casa, pero no un hogar
El dinero puede comprar adornos, pero no cultura
El dinero puede comprar libros, pero no un cerebro
El dinero puede comprar comida, pero no apetito
El dinero puede comprar compañía, pero no una verdadera amistad
El dinero puede comprar una banca para el templo, pero no el cielo
El dinero puede comprar un crucifijo, pero no un salvador...

Lo que el dinero no puede comprar Dios te lo da gratuitamente.
Solo necesitas pedírselo de todo corazón.

Desconozco a su autor


miércoles, 22 de marzo de 2017

Lo que te hace daño… ¡Olvídalo!
* Las resacas que dejaron las tormentas de este año… ¡Olvídalas!
* Los pasos tambaleantes, los pasos retrasados, los pasos hacia atrás… ¡Olvídalos!
* Las veces que pasaste ignorado, inadvertido, lastimado… ¡Olvídalas!
* Los sueños consumidos, las ilusiones hechas cenizas, los intentos hechos polvo y el amor hecho recuerdo… ¡Olvídalos!
* Las veces que latió tu corazón y nadie se dio cuenta, que quisiste hacer y no te dejaron, que abriste los ojos y te cerraron los párpados… ¡Olvídalas!
* Las estrellas apagadas, los días opacos, el tiempo en blanco, la luna dividida y las horas de cerrazón… ¡Olvídalas!
* El manto de insignificancia, de masa, de anonimato… de rutina…¡Olvídalo!
* Las espinas largas y hondas, los secretos angustiosos y tristes, las piedras altas e insalvables… ¡Olvídalas!
* Las semillas que se te quedaron dormidas, los vuelos que se te quedaron a ras de tierra, las rosas que se secaron antes de tiempo… ¡Olvídalas!
* La cáscara de la semilla, el lucimiento de la vanidad, la máscara del hombre y el ropaje de la verdad… ¡Olvídalo!

* No vivas hacia atrás.
* No comiences recargado de sombras.
* No des la espalda a la luz.
* No te reflejes en lo que pasaste.
* No te aferres al mismo punto de partida

Párate en la proa de tu barco, levanta de nuevo las velas, mira hacia lo largo y lo ancho del mar …
… cuando te convenzas de su inmensidad encontrarás otro camino y, cuando mires al cielo parecerás gaviota que apartándose de todo encuentra el camino.

Con el pasado aprendes, con el presente renaces y con el futuro sueñas.
Vivir empezando, es la forma de llegar.
Lo demás… ¡Olvídalo!

Desconozco a su autor


martes, 21 de marzo de 2017

Cuando sentimos que nuestra mente está llena de pensamientos enredados y que no encontramos el hilo de cada uno de ellos, nos da por la desesperación, y queremos huir a donde sea, cerrar los ojos y ya no abrirlos.

Cuánta cobardía de nuestra parte el no querer hacer frente a nuestros problemas, y creemos que nadie nos entiende porque solo nosotros sabemos cuán son de grandes y dolorosos. Y cuánto tiempo estamos perdiendo en sufrir en vez de buscar la solución.

Cuando estamos perdidos en el mar de confusiones, nos molesta mucho que nos digan que tenemos la solución, porque pensamos que los culpables de nuestro sufrimiento son otros y no nosotros.

Es muy difícil aceptar que nosotros somos el propio remedio para nuestra curación pero, ¿por qué no hacemos caso solo por una vez y lo intentamos?

El remedio esta ahí, macerándose y esperando a ser utilizado para acabar con el sufrimiento que nos está marchitando la Vida que con tanto gusto Dios nos la da.

Desconozco su autor


domingo, 19 de marzo de 2017

Que sencillo es ocupar un lugar en una agenda telefónica.
Pero que difícil es ocupar el corazón de alguien de forma sincera…

Que sencillo es herir a quien nos ama.
pero que difícil es curar esa herida…

Que sencillo es dictar reglas.
pero que difícil es seguirlas al pie de la letra…

Que sencillo es soñar todas las noches.
pero que difícil es luchar por un sueño…

Que sencillo es exhibir la victoria.
pero que difícil es a veces asumir la derrota con dignidad…

Que sencillo es tropezar en una piedra.
pero que difícil es levantarte rápido la mayoría de las veces

Que sencillo es disfrutar de las bendiciones todos los días.
pero que difícil es compartirlas con los demás muchas veces …

Que sencillo es prometerle a alguien algo.
pero que difícil es cumplir la promesa …

Que sencillo es decir que amaremos por siempre.
pero que difícil es ponerlo por obra…

Que sencillo es criticar a los demás.
pero que difícil es mejorar uno mismo…

Que sencillo es cometer errores.
pero que difícil es aprender de ellos…

Que sencillo es llorar por el amor perdido.
pero que difícil es cuidarlo para no perderlo…

Desconozco a su autor

¿Por qué hay gente que actúa como si quisiera ser infeliz? Esta es la pregunta de la psicóloga y terapeuta familiar Cloe Madanes, que cree que "en ausencia de guerras y otras desgracias", algunas personas "se esfuerzan" por ser infelices. En un ejercicio de psicología inversa, (la que se usa con los niños cuando no quieren obedecer) nos da la "receta" para ser miserables. No la practiques en casa.

Estos son 13 Hábitos de gente triste:

1. Vive con miedo a perder el trabajo o el dinero. Ser prudente está bien, pero pensar constantemente en la inseguridad te llevará a la depresión.

2. Practica el aburrimiento, piensa que la vida no es excitante, que no nos esperan sorpresas ni aventuras. Te convertirás en aburrido y la gente te evitará.

3. Usa el sarcasmo. Expresa una larga lista de críticas siempre que puedas, sobre todo de forma hiriente, aplicando tu negatividad a cualquier situación (por ejemplo criticar una película o cualquier cosa que le gusta a la mayoría de tus amigos).

4. Crea una identidad negativa, sé una persona deprimida, débil, enfermo, una persona con fobia social, evitando cualquier situación nueva para morirte de aburrimiento.

5. Desconfía de los demás, "piensa mal y acertarás". Todos actúan por propio interés, por sentirse superiores, porque te quieren engañar o por envidia. La bondad y el altruismo no existen, el hombre es malo por naturaleza y quien diga lo contario es un ingenuo.

6. Pelea siempre que puedas, haz un drama, quéjate, grita o llora por cualquier detalle. Sé agresivo, osco, dañino y niégalo después.

7. Practica la ingratitud, quien sabe dar las gracias es más feliz, así que nunca lo hagas. La vida es sufrimiento y luego morimos, así que ¿por qué estar agradecido?

8. Encuentra una pareja… a la que transformar; con un defecto grave (alcohólico, jugador, sociópata…) que has de cambiar.

9. Culpa a los demás, sobre todo a tus padres, disipando cualquier posibilidad de encontrar la paz interior; culpar, todo un arte en la ruta hacia la infelicidad.

10. Desprecia las celebraciones y los placeres de la vida. La música, el vino, la comida, la belleza de la naturaleza, sus atardeceres y paseos por la playa o la montaña, las reuniones de familia o amigos y en general la alegría de vivir son tonterías de personas frívolas. Recuerda siempre que el mundo está plagado de injusticia, pobreza, muerte y devastación.

11. Hagas lo que hagas, saca beneficio. No nos engañemos, quien no se aprovecha es porque no puede, el altruismo causa bienestar, por eso es una estupidez.

12. Glorifica el pasado, cualquier tiempo pasado fue mejor y el presente es una decepción, antes el mundo no era así, la gente era mejor. También puedes demonizar el pasado, naciste en el lugar equivocado, tienes traumas de la infancia, del pasado que no debes olvidar.

13. Quéjate, quéjate mucho, rumia y disfruta los pensamientos negativos y exprésalos constantemente, haz que se apoderen de tu día a día y con suerte llegarás a ser insoportable. Así te aislarás socialmente, la llave de la infelicidad.

Desconozco el Autor


sábado, 18 de marzo de 2017

Tu vida esta plena de logros,
Luchas y grandes esfuerzos,
Y aunque a veces no parezca
Cada día te vas acercando
Paso a paso a lo que tú quieres.

Pero ten cuidado, puedes tener
Un enemigo, capaz de destruir
Sin piedad lo que con tanto trabajo has construido.

Me refiero a tus propios resentimientos.

El resentimiento es como tomar un veneno
Para tratar de envenenar a otro.
Mientras el dolor pasa, el rencor se queda,
Lo agravas, como a una herida que no se deja sanar.

El resentimiento es un monstruo,
Que puede tener el tamaño que le des, lo puedes alimentar
Con los pensamientos de queja y de autocompasión
Entre mas lo crezcas mas partes de tu vida invadirá.

La energía que le das a ese fantasma, es la misma
Que puedes usar para construir tus sueños
O la vida más plena y feliz que te mereces.
Quien no perdona sin darse cuenta poco a poco se aísla,
Empieza a olvidar o dejar de disfrutar lo grato de su vida.

Con el rencor te haces mas difícil, lo difícil
y lo agradable se opaca con el tormento de la amargura.

Digno no es quien resiente,
Digno es quien perdona.

Que estúpida es la venganza que mantiene anclado el dolor.

La venganza sabia es dejarlo ir
Seguir adelante, es construirse en vez de destruirse.

El perdón es un regalo, para si mismo
Es regalarse la paz.
Es soltar la carga
Es decidir mirar la luz de nuevo
Y con determinación caminar hacia ella,
Hacia lo mejor de ti, de tu vida.

No perdones para que el otro cambie
Acéptalo el otro nunca va a ser como tu quieres,
Eso no depende de ti.

No le des a nadie el poder de hacerte infeliz
Perdona por que decides hacerlo,
Retoma tu poder
Tu inmensa capacidad de construir tu propia tranquilidad.

Desconozco a su autor


viernes, 17 de marzo de 2017

Cuando el cielo esté gris
Acuérdate cuando lo viste profundamente azul.
Cuando sientas frío
Piensa en un sol radiante que ya te ha calentado.
Cuando sufras una derrota
Acuérdate de tus triunfos y de tus logros.
Cuando necesites amor
Revive tus experiencias de afecto y ternura.
Acuérdate de lo que has vivido
y de lo que has dado con alegría
Recuerda los regalos que te han hecho,
los besos que te han dado,
los paisajes que has disfrutado
y las risas que de ti han emanado.
Si esto has tenido
Lo podrás volver a tener
y lo que has logrado,
lo podrás volver a ganar.
Alégrate por lo bueno que tienes
y por lo de los demás;
desecha los recuerdos tristes y dolorosos,
no te lastimes más.
Piensa en lo bueno, en lo amable,
en lo bello y en la verdad.
Recorre tu vida y detente en donde haya
bellos recuerdos y emociones sanas y vívelas otra vez.
Aquel atardecer que te emocionó.
Revive esa caricia espontánea que se te dió
Disfruta nuevamente de la paz que ya has conocido,
piensa y vive el bien.
Allá en tu mente están guardadas todas las imágenes
Y solo tú decides cuáles has de volver a mirar…

Desconozco a su autor

jueves, 16 de marzo de 2017

Sé firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal. Pero sé paciente, no pretendiendo que todo te llegue de inmediato. Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo vendrá a tus manos en el momento oportuno. Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas. Espera con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura. 

No seas esclavo del pasado y los recuerdos tristes. No revuelvas una herida que está cicatrizada. No rememores dolores y sufrimientos antiguos. ¡Lo que pasó, pasó!. De ahora en adelante, procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto y camina hacia delante, sin mirar hacia atrás. 

Haz como el sol que luce cada día sin acordarse de la noche que pasó. Sólo contempla la meta y no veas que tan difícil es alcanzarla. No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que puedes hacer. No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar. 

No trates que otros cambién; Sé tú el responsable de tu propia vida y trata de cambiar tú. Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su tiempo. No sufras por lo que viene, recuerda que "cada día tiene su propio afán". Busca a alguien con quien compartir tus luchas hacia la libertad; una persona que te entienda, te apoye y te acompañe en ella. 

Si tu felicidad y tu vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala, sin pedirle nada a cambio. Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en tí como en algo precioso. Desparrama en todas partes la alegría que hay dentro de tí. Que tu alegría sea contagiosa y viva para expulsar la tristeza de todos los que te rodean. La alegría es un rayo de luz que debe permanecer siempre encendido, iluminando todos nuestros actos y sirviendo de guía a todos los que se acercan a nosotros.Si en tu interior hay luz y dejas abiertas las ventanas de tu alma, por medio de la alegría, todos los que pasan por la calle en tinieblas, serán iluminados por tu luz. 

Trabajo es sinónimo de nobleza. No desprecies el trabajo que te toca realizar en la vida. El trabajo ennoblece a aquellos que lo realizan con entusiasmo y amor. No existen trabajos humildes. Sólo se distinguen por ser bien o mal realizados. Da valor a tu trabajo, cumpliéndolo con amor y cariño y así te valorarás a tí mismo. 

El universo nos ha creado para realizar un sueño. Vivamos por él, intentemos alcanzarlo. Pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizás entonces necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio radical en nuestras vidas.Así con otro aspecto, con otras posibilidades y con la ayuda del universo, lo haremos. 

No te des por vencido, piensa que si estamos aquí, es porque podemos vivir esta vida que nos ha tocado vivir. El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino. 

Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida. 

"QUE ESTE DÍA SEA EL MEJOR DE TU VIDA". 

Mahatma Ghandi

miércoles, 15 de marzo de 2017

Todos juntos en este incierto viaje, hacia un destino común: la última estación.
Una estación desconocida para todos... una incógnita... En este hermoso viaje para algunos y desagradable para otros nuestras vivencias aumentan día a día... Nos hacen más sensibles o nos endurecen día a día. Estación tras estación se suceden diariamente, y pasamos del amor al desamor, de la esperanza a la desesperanza, del apego al abandono, de alegría a la tristeza... O tal vez nuestras estaciones se suceden en orden diferente... pero una tras otra forman parte de nuestras vidas.
Cada estación tiene un mensaje, una enseñanza. Nos encontramos con rostros conocidos en este tren o con otros que nunca vimos antes pero que aparecen por algo en nuestras vidas.
Al iniciar el viaje nuestra valija no nos pesa tanto, pero minuto a minuto se llena de recuerdos, de pasiones, de momentos...
Tratemos de no ser rígidos en el recorrido, tratemos de desviarnos cuando nuestro espíritu así lo quiere, tratemos de descansar cuando el cansancio ya no nos permite disfrutar ni gozar...
La meta final nos espera a todos por igual, está en nosotros disfrutar de este viaje y llevarnos en la valija lo más lindo, lo más profundo, y todo aquello que hace que un simple paseo se convierta en un viaje inolvidable.
El viaje puede ser importante pero el contenido de nuestra valija es el que nos permitirá seguir de pie ante las adversidades, ante los contratiempos.
Por eso no dudemos en guardar en ella los mejores recuerdos, las más hermosas pasiones, los más grandes amores y por sobre todo: los instantes en que fuimos muy pero muy felices... Sólo abriendo esa valija a medida que se acerque la última estación podremos afirmar que valía la pena este viaje. 

Graciela Heger.


martes, 14 de marzo de 2017

El amor comienza con una sonrisa, crece con un beso y muere con una lagrima. Duele amar a alguien y no ser correspondido, pero es más doloroso amar a alguien y nunca encontrar el valor para decirle a esa persona lo que sientes, tal vez Dios quiere que conozcamos a unas cuantas personas equivocadas antes de conocer a la persona correcta, para que al fin cuando la conozcamos, sepamos ser agradecidos por ese maravilloso regalo.

Una de las cosas mas tristes de la vida es cuando conoces a alguien que significa todo y solo para darte cuenta que al final no era para ti y lo tienes que dejar ir. Cuando la puerta de la felicidad se cierra otra puerta se abre, pero algunas veces miramos tanto tiempo aquélla que se cerró, que no vemos la que se ha abierto enfrente de nosotros. Es cierto que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, pero también es cierto que no se sabe lo que hemos estado perdiendo hasta que lo encontramos.

Darle a alguien todo tu amor nunca es garantía de que te amará, pero no esperes que te ame; solo espera que el amor crezca en el corazón de la otra persona, pero si no crece, se feliz por que creció en el tuyo.

Hay cosas que te encantaría escuchar y que nunca escucharas de la persona que te gustaría que te las dijera, pero no seas sordo para no escucharlas de aquélla que las dice de su corazón. Nunca digas adiós si todavía quieres tratar, nunca te des por vencido si sientes que puedes seguir luchando, nunca le digas a una persona que ya no la amas si no la quieres dejar ir.

El amor llega a aquel que espera, aunque lo hayan decepcionado, a aquel que cree, aunque haya sido traicionado, a aquel que todavía necesite amar, aunque antes haya sido lastimado, y aquel que tiene el coraje y la fe para construir la confianza de nuevo.

El principio del amor es dejar que aquellos que conocemos sean ellos mismos y no tratarlos de voltear a nuestra propia imagen, por que entonces solo amaremos el reflejo de nosotros mismos en ellos. Ve por alguien que te haga sonreír, porque toma tan solo una sonrisa para que una noche oscura brille como la mas radiante estrella, espero que encuentres a aquélla persona que te haga sonreír.

La brillantez del futuro siempre esta basado en un pasado olvidado, no puedes ser feliz por la vida hasta que dejes ir tus fracasos y los dolores de tu corazón y vayas de la mano de Dios.

Cuando tu naciste, tu llorabas y todos sonreían, vive tu vida de tal forma que cuando mueras, tu sonrías y todos a tu alrededor lloren.

Desconozco a su autor


lunes, 13 de marzo de 2017

Cuántas veces hemos juzgado injustamente a las personas. Lo que es peor, las juzgamos y las condenamos sin investigar a qué se debe su comportamiento.

Una chica estaba aguardando su vuelo en una sala de espera de un gran aeropuerto. 
Como debía esperar un largo rato, decidió comprar un libro y también un paquete de galletas. 
Se sentó en una sala del aeropuerto para poder descansar y leer en paz. Asiento de por medio, se ubicó un hombre que abrió una revista y empezó a leer. 

Entre ellos quedaron las galletas. 
Cuando ella tomó la primera, el hombre también tomó una. 
Ella se sintió indignada pero no dijo nada. 

Apenas pensó: ¡Qué descarado! Si yo estuviera más dispuesta, hasta le daría un golpe para que nunca más se olvide de la grosería!”. 

Cada vez que ella tomaba una galletita el hombre también tomaba una. 
Aquello la indignaba tanto que no conseguía concentrarse ni reaccionar. 

Cuando quedaba apenas una galleta, pensó: “¿qué hará ahora este abusador?”. Entonces, el hombre dividió la última galleta y dejó una mitad para ella. 

¡Ah! ¡No!… ¡Aquello le pareció demasiado! ¡Se puso a bufar de la rabia! cerró su libro y sus cosas y se dirigió al sector del embarque. 

Cuando se sentó en el interior del avión, miró dentro del bolso y para su sorpresa, allí estaba su paquete de galletitas… intacto, cerradito… ¡Sintió tanta vergüenza! 

Sólo entonces percibió lo equivocada que estaba. ¡Había olvidado que sus galletas estaban guardadas dentro de su bolso! 

El hombre había compartido las suyas sin sentirse indignado, nervioso, consternado o alterado, y ya no había más tiempo ni posibilidades de explicar o pedir disculpas aunque sí para razonar. ¿Cuántas veces en nuestra vida sacamos conclusiones cuando debiéramos observar mejor?. ¿Cuántas cosas no son exactamente como pensamos acerca de las personas? 

Y recordó que existen cuatro cosas en la vida que no se recuperan:
  • Una piedra, después de haber sido lanzada. 
  • Una palabra, después de haber sido proferida. 
  • Una oportunidad, después de haberla perdido. 
  • El tiempo, después de haber pasado.
Desconozco a su autor



domingo, 12 de marzo de 2017

La “voluntad” es lo que genera la energía y el valor para crear.

El “querer”, por sí mismo, no es suficiente. Estar “dispuesto” nos mueve más allá de nuestras limitaciones y hacia la grandeza.

Las aves vuelan, los peces nadan y los seres humanos crean. Esa es nuestra naturaleza. Al final del día, tanto los optimistas como los pesimistas están siempre en lo correcto. ¿Por qué esperar entonces cuando podemos crear?

Cuando damos por sentado nuestro éxito, no nos brindamos la oportunidad de aprender del proceso y aplicarlo en otras áreas de nuestra vida. El fracaso es simplemente un resultado que difiere del que esperábamos.

Podemos tener éxito ahora o más tarde; depende sólo de nosotros. El éxito está esperando, aquí y ahora. No le importa de dónde venimos, lo que hacemos o lo que hicimos anteriormente. Está disponible a todo aquel que lo quiere y está preparado para salir a tomarlo.

“No siempre podemos obtener lo que queremos” podrá ser una buena letra de una canción, pero es un lema terrible para la vida.

Entre más practiquemos el crear éxito en un área, más fácil será el crearlo en otras. Si estás intentando crear algo perfecto, tengo dos palabras de advertencia para ti: ¡Supera eso!

Para ser exitosos, lo que hacemos, debe importanos. Crear éxito es asunto de cumplir o manifestar el propósito para el cual nacimos.

Cuando nuestra mente está despierta, atenta y lista para ser usada, hallaremos que podemos crear cualquier cosa que estemos dispuestos a tener. Nuestra mente nos da el poder tanto para crear como para destruir.

Citado de “Elementos del Éxito” de Nisandeh Neta

sábado, 11 de marzo de 2017

El amor no se mendiga, se da cuando lo sientes. 
El amor no se busca, llega sin esperarlo. 
El amor no son momentos, es una filosofía de vida. 
El amor no se fuerza, es espontáneo. 
El amor no son solo caricias, son sentimientos. 
El amor no es todo alegría, también dolor y sufrimiento. 
El amor no es querer, es dar solo dar. 
El amor no es pedir, es el deseo de servir. 
El amor no es ser feliz tú, sino desear la felicidad al otro. 
El amor no es razonar, es dejarse llevar por el corazón. 
El amor no es querer entender, es aceptar las diferencias. 
El amor no son solo 4 letras, es toda una palabra reflejada en TI.

Desconozco a su autor

viernes, 10 de marzo de 2017

En este trajinar de vuelos a ninguna parte somos lo que hacemos.
Cada uno ha de hacerse y rehacerse asimismo para poder ser.
Somos personas de acción y reacción, de respuestas y preguntas.
Nada nos rejuvenece tanto como desvivirse por querer vivir.

Nuestra naturaleza está en las idas y venidas, en las vueltas y revueltas, en saber orientarse y reorientarse, en hallarse acompañado por sí mismo y acompasado por la propia vida, en reencontrarse como la propia semilla con la tierra y florecer.

Más allá de la flor está el sentimiento y su jardín de sensaciones.
Ahí radica la hermosura, en su manera de sentir y coexistir, en su modo de despertar al asombro y su carácter firme, en la mística sensible de un latido que enamora interiormente.

Quien se mece en la vida interior sabe lo que es estremecerse.
Quien se acuna a la luz de la aurora, no conoce ocaso alguno.
Quien se despierta con los ojos del alma, irradia paz su mirada.
Quien se olvida de sí para donarse, se convierte en una estrella.

Tenemos que alumbrar tantos caminos como horizontes.
Y tantos horizontes como realidades que nos ensombrecen.
Y tantas realidades como sueños que nos cautivan el espíritu.
Y tantos sueños como ilusiones que nos asombran por su belleza.

Nunca desistas de embellecer caminos y de enderezar sendas.
La senda que uno emprendió ayer, esa misma seguirá mañana.
Tampoco hay mayor aliento que la ilusión recibida como alimento.
Nos llega a través del amor y nos llena tanto que nos renace.

Víctor Corcoba Herrero.


jueves, 9 de marzo de 2017

Aprovecha al máximo cada hora, cada día y cada época de la vida. Así podrás mirar al futuro con confianza y al pasado sin tristeza Sé tú mismo. Pero sé lo mejor de ti mismo. Ten valor para ser diferente y seguir tú propia estrella. Y no tengas miedo de ser feliz. Goza de lo bello. 

Ama con toda el alma y el corazón. Cree que aman, aquellas personas que tú amas. Olvídate de lo que hayas hecho por tus amigos y recuerda, lo que ellos han hecho por ti. No repares en lo que el mundo te debe y fíjate en lo que le debes al mundo. 

Cuando te enfrentes a una decisión, tómala tan sabiamente como te sea posible. Luego olvídala. El momento de la certeza absoluta nunca llega. Sobre todo recuerda, que Dios, ayuda a quienes se ayudan a sí mismos. 

Actúa como si todo dependiera de ti, y reza como si todo dependiera de Dios. Vive cada día a plenitud.

Desconozco a su autor


miércoles, 8 de marzo de 2017

A todos los que conocimos y olvidamos, a los que nos conocieron y nos olvidaron, a los que recordamos y nos recuerdan, a los que amamos y ya no, a los que aún nos mueven cuando los vemos, aunque ya no nos hablemos.”

“Gracias” es una de esas maravillosas palabras que siempre la guardamos para nosotros. Muchas veces cuando las personas hacen algo por una damos por hecho que ya agradecimos lo que han hecho por nosotros, pero no es así, es importante dar las gracias por cada gesto de bondad que recibimos.

Debemos estar agradecidos cuando alguien nos llama por teléfono para preguntarnos cómo estamos. ¿Quién obliga a una persona llamar a otra? Nadie, sólo lo hacen porque nos quieren y nos aprecian.

No seamos personas ingratas y sepamos
dar las gracias a cualquier persona que haga algo por nosotros. Un ejemplo muy claro es que cuando vamos a un salón a tomar un té pagamos la cuenta, rara vez dando las gracias a quien nos estuvo atendiendo lo mejor que pudo.

Yo siempre agradezco, hasta a la persona que trabaja en el supermercado y nos muestra el producto, es un gesto amable y hay que agradecer. Cuando nos despertamos y abrimos los ojos ¿damos las gracias a Dios por el solo hecho de respirar? Bueno, eso lo respondemos para nosotras mismos.

Debemos dar las gracias a los amigos que hemos conocido por Internet, que muchas veces son mejores amigos que los que tenemos a nuestro lado, siempre ofreciéndonos su apoyo.

Cuando vas por la calle y se acerca una persona hablar contigo, da las gracias por el hecho de hablarte, de ser amiga tuya, esa palabra tan maravillosa “Gracias”… es muy corta pero poco usada.

Siempre demos las gracias.
No lo olvidemos, no cuesta nada dar las gracias
. Al contrario, te hace más grande.

Nunca des las cosas por sentadas, di con palabras lo que sientes, muchas veces por perezosas no llamamos a la casa o a nuestros amigos y cuando llamas ya es tarde pues esa persona ya no está y lo peor es que ya no volverá, como cuando alguien que amamos se va de este mundo y no pudimos hablarle.

No dejemos nada para mañana, muchas veces puede ser demasiado tarde, hoy mismo agradece todo lo que han hecho por ti y empieza por decirle a Dios “muchas gracias Señor por darme un día más para enmendar mis errores” y después, a todas esas personas que hemos dejado de lado…

Decir gracias, es la mejor palabra que nuestra boca puede salir.

Desconozco a su autor